martes, 30 de enero de 2018

NIEBLA DEL RIACHUELO - VERANO BRISAS - A CAPELA

















Niebla del Riachuelo

Música: Juan Carlos Cobián. Letra: Enrique Cadícamo.

Turbio fondeadero donde van a recalar,
barcos que en el muelle para siempre han de quedar...
Sombras que se alargan en la noche del dolor,
náufragos del mundo que han perdido el corazón...
Puentes y cordajes donde el viento viene a aullar,
barcos carboneros que jamás han de zarpar...
Torvo cementerio de las naves que al morir
sueñan, sin embargo, que hacia el mar han de partir...

¡Niebla del Riachuelo!...
Amarrado al recuerdo
yo sigo esperando...
¡Niebla del Riachuelo!...
De ese amor, para siempre,
me vas alejando...
Nunca más volvió,
nunca más la vi,
nunca más su voz nombró mi nombre junto a mí...
esa misma voz que dijo: "¡Adiós!".

Sueña, marinero, con tu viejo bergantín,
bebe tus nostalgias en el sordo cafetín...
Llueve sobre el puerto, mientras tanto mi canción;
llueve lentamente sobre tu desolación...
Anclas que ya nunca, nunca más han de levar,
bordas de lanchones sin amarras que soltar...
Triste caravana sin destino ni ilusión,
como un barco preso en la "botella del figón"...

MAÑANA ZARPA UN BARCO - VERANO BRISAS - A CAPELA
















Mañana Zarpa un Barco

Música: Lucio Demare. Letra: Homero Manzi.

Riberas que no cambian tocamos al anclar;
cien puertos nos regalan la música del mar.
Muchachas de ojos tristes nos vienen a esperar
y el gusto de las copas parece siempre igual;
tan sólo aquí en tu puerto se alegra el corazón,
riachuelo donde sangra la voz del bandoneón.
Bailemos hasta el eco del último compás;
mañana zarpa un barco, tal vez no vuelva más...

¡Qué bien se baila sobre tierra firme!
Mañana al alba tendremos que zarpar;
la noche es larga, no quiero que estés triste;
muchacha, vamos; no sé por qué llorás...
Diré tu nombre cuando me encuentre lejos,
tendré un recuerdo para contarle al mar;
la noche es larga, no quiero que estés triste;
muchacha, vamos; no sé por qué llorás...

Dos meses en un barco viajó mi corazón,
dos meses añorando la voz del bandoneón.
El tango es puerto amigo donde ancla la ilusión,
al ritmo de su danza se hamaca la emoción.
De noche, con la luna soñando sobre el mar,
el ritmo de las olas me miente su compás.
Bailemos este tango, no quiero recordar;
mañana zarpa un barco, tal vez no vuelva más...

lunes, 22 de enero de 2018

Del libro "Trampantojos y otros versos"
















MÁS ALLÁ

Más allá de esta jungla de cemento,
saturada de smog y de violencia,
se observan los cambiantes arreboles
brillando encima de las cordilleras
como bálsamos que sanan ipso facto
las antiguas heridas del espíritu,
náufrago esperanzado y resistente
sobre un tronco flotante y salvador,
batiendo el mar y sus agrestes olas.

Mas allá de esta jungla que nos niega
los placeres más sencillos y baratos,
propios del amor, cuando es sincero,
se desplazan los colores que convidan
a vivir con los ojos siempre abiertos.

Más allá de esta jungla bulliciosa
están las ilusiones y proyectos,
igual que los recuerdos y el olvido,
teñidos todos de belleza y canto.

Más allá se divisan las estrellas
que titilan con sus rayos sempiternos
para muchos corazones concentrados
en oscuras rebatiñas cotidianas.

Sólo el poeta ve cómo se agitan
esos mundos del múltiple universo,
errantes siempre por el ancho espacio
como seres de trémulos suspiros,
en el tope de un todo indescifrable,
al volver su mirada al firmamento.

sábado, 6 de enero de 2018

Del libro "Voces de mar y tierra"

















80 AÑOS

Desde niño tuve un sueño:
vivir hasta el 2018.
80 años es una edad espléndida
llena de rumbos y connotaciones.

Ahora, tengo otro sueño:
vivir hasta el 2040.
Para lograrlo,
inicié conversaciones con la muerte
y hemos firmado un tratado de paz.
Ella, pertenece al establecimiento.
Yo, pertenezco a la guerrillerada.
Ya ustedes saben quién faltonea a quién.