miércoles, 2 de enero de 2013

Del libro "Patente de corso"



NO ESTÁ LA TIERRA PARA HACER SONETOS

11

Detestable delito es el secuestro
y la puesta de minas quiebra patas,
que estallan en sonoras cataratas
segando lo mejor del suelo nuestro.

Nunca sabré si blasfemar de retro
por el hondo dolor que me arrebata,
o ese mismo dolor forrarlo en plata
con lágrimas de amor y Padrenuestros.

Detestable labor es todo aquello
y también la tozuda indiferencia
con que se mira el infernal delito

que cobra impuesto y legaliza el sello
del crimen y su pérfida conciencia,
cuando falta honradez y sobra el mito.