viernes, 14 de febrero de 2014

Del libro "Poemas escandinavos"




EL DIOS BURLADO

Ni siquiera Odín fue inmune
a la astucia femenil de Frigga,
cuando ésta, logrando sus propósitos
por encima de cualquier dificultad,
de nuevo exigió al Supremo Tuerto
cumplir lo prometido cabalmente.
Ocurrió cuando vándalos y winilers
se trabaron en contienda decisiva.

Una trampa de la reina madre,
basada en las palabras de Wotán,
surtió pronto los efectos deseados,
cuando éste interrogó, muy aturdido
al ver tan armadas brutalmente
muchas mujeres frente a su ventana:
¿Dime quiénes son esos barbudos?

La taimada esposa y soberana
sumió al dios en un profundo sueño,
mientras hacía colocar la cama
en tal forma, que quitaba el grueso
del ejército de vándalos al frente
y otorgaba la victoria a los winilers.

Nadie pues, en sano juicio
y visto lo anterior, debe confiar
en astutas patrañas femeninas
si quiere proceder con tino cierto,
aunque crea ser un dios inteligente,
imposible de engañar con artilugios.