domingo, 31 de mayo de 2015

Del libro "Como simples chalupas al garete"



AGONÍA DEL MAR

El mar, igual que muchos seres,
es una inmensa sucesión de olas
que viajan sollozantes a su suerte.

En su perpetuo vaivén y su bravura
se defiende como lobo herido
de la insania feroz que lo asesina
cuando ataca sin piedad su vientre.

Ruge y se debate como un dios
desterrado del cielo prometido,
tras la estocada fatal que lo acribilla
contra un fondo de coral iridiscente,
en tanto gimen las naves en el puerto
donde lloran su desgracia y su partida.

El mar, como ya dije,
es una inmensa sucesión de olas
con sus crestas de espuma y de ceniza,
quebrando agonizantes en la playa
como sartas de odio desprendidas
de aquel país que idolatró la muerte.