ORIGEN DE LA
POESÍA
Cuando la paz entre
los esir y los vanas,
ambos escupieron
dentro del jarrón
preparado para
el acontecimiento.
De su saliva
nació un hombre
pleno de
sabiduría y sensibilidad
que andaba por
el mundo respondiendo
las preguntas
que le formulaban.
Cuando los
enanos conocieron
el talento de
este ser extraordinario,
decidieron perseguirlo
noche y día
con el propósito
de asesinarlo.
Luego su sangre
fue guardada
en tres
recipientes singulares:
inspiración,
ofrenda y expiación,
que mezcladas
con virtuosa miel
produjeron la
bebida hechizadora,
esencial para
poetas y oradores.
Los matones no
bebieron el brebaje
y tuvieron que
entregarlo a Suttung
para salvar sus
asquerosas vidas.
Odín, con los ojos de sus cuervos,
lo halló en el
vientre de una cumbre
donde el gigante
lo tenía guardado.
Más tarde,
transformado en águila,
y superando
numerosas peripecias,
voló hasta Asgard y expulsó completa
la preciada
aguamiel que había robado.
Permitió que
bebieran los humanos
para engendrar
en siglos venideros
los mejores poetas
y cantores
deseosos de honrar
a Escandinavia,
lo mismo que
otras tierras prodigiosas
habitadas por valkirias y por dioses.