miércoles, 30 de octubre de 2013

Del libro "Poemas de mediopelo"



LA FLAUTA MÁGICA

Cuando el inefable estallido originó
la burbuja expansible y prisionera
en el concepto del espacio-tiempo,
comenzó a prefijarse el pentagrama
que Pitágoras plasmó en su geometría.

Los dioses del amplio firmamento,
para fiesta y solaz de los humanos,
modelaron con sus notas celestiales
el candente corazón del universo.

Luego llegó Mozart con su Flauta
desbordando mi naciente fantasía,
cuando supo rescatar altivo,
a través de Tamino y Papageno,
la hija de la Reina de la Noche,
raptada por las mañas de Sarastro.

¿Pulsarán los planetas y los astros,
las cuerdas de la cítara divina?
Si lo hacen será porque su música
es el único alfabeto que contiene
el libro sin fronteras de lo eterno,
el poema que abarca lo infinito
y el sonido que nombra lo perfecto.