sábado, 11 de octubre de 2014

Del libro "Poemas misceláneos"



NENCATACOA

Tú, que sabes pintar, tejer, cantar y danzar,
siendo además el dios de las borracheras,
que apareces inopinadamente
con tu cuerpo de zorra reluciente,
entre los matorrales y altozanos de mi tierra,
protege con tu poder mis creaciones,
que aunque siendo tan humildes
rinden tributo y reconocimiento
a los placeres de la carne y del espíritu,
como a ti te agrada.

En cambio te haré diez mil ofrendas
dando lo mejor de mis cosechas
y construyendo ese bohío
al cual he de llevar mi enamorada,
para tenderla sobre un lecho de flores
antes de amarla como tú me enseñas
y como ella siempre lo ha soñado.

Viviremos los tres en bacanales
bebiendo sin pena y sin medida,
igual que Dionisio en Grecia
y Baco en la violenta Roma,
porque aquí en América del Sur
disfrutamos también de los placeres
que conducen directo al paraíso.