viernes, 21 de diciembre de 2012

Del libro "Patente de corso"



PATENTE DE CORSO

Patente que ahora exhibo
ante el imperio de lo eterno,
otorgada por el mismo
que me dio sin consultar la vida,
y que doy al servicio de mis ansias
creativas y amorosas.

Compañera de mis viajes cósmicos
por las galaxias de la poesía,
cruza los ríos cambiantes y agitados
de mi corazón salvaje.

Patente que me da el derecho
de argumentar frente al mundo
que se hunde inexorablemente
en las letrinas de la intolerancia.

Patente que defiendo con firmeza
cuando ataca el enemigo
mi navío de rápidos velámenes
en los mares de la imaginación.

Patente que rebasa los escollos
con el salvavidas de mi fantasía,
cuando navego sin ancla y sin timón
sobre las aguas de la cotidianidad.

Patente que concede sin reparo
privilegios a una casta inmune,
no apta para las mayorías,
que soporta sin protesta la desgracia
de un vivir opaco y anodino,
infecundo y torvamente inútil.