sábado, 3 de mayo de 2014

Del libro "Poemas siderales"



PTOLOMEO

Fueron necesarios 2.000 años
para demostrar que andabas en error,
que la Tierra no era el centro
de tus delirios fantásticos.

Describiste las órbitas celestes
en un montaje perfecto
de movimientos circulares,
que ofuscaron incluso los cerebros
de ilustres renacentistas.

Tu ingenioso sistema cosmológico
fue una singularidad poética,
con la cual testimoniaste la llegada
al hermoso planeta de los simios.