viernes, 3 de mayo de 2013

Del libro "Poemas de Mar-K" (Homenaje a la K)



MAR–K–34

Los ke mucho hablan kasi nunka son sabios,
y éstos poko lo hacen,
no por inkapacidad sino por falta de vokación.
Sin embargo, konversar es un arte placentero
entre personas inteligentes y afines.

Hace tiempo se ofrecían por korrespondencia
kursos especiales de konversación
anunciados en diarios y revistas de Kolombia,
procedentes de los Estados Unidos;
ignoro si kon buenos o malos resultados.

Pero sentarse kon amigos en un sillón,
kama o taburete
a degustar ese manjar ke es la palabra,
da la posibilidad rekonfortante
de komunikarnos kon lo deskonocido,
ke se mueve invisible
en nuestros korazones y cerebros.

La vida moderna y la televisión
han perjudikado la kalidad del verbo,
komo la deforestación de los suelos
la pureza y abundancia de los ríos.

Hoy las palabras están kontaminadas y fétidas
en la letrina de la sikosis kolektiva;
son la injuria y la kalumnia personales
las ke gobiernan las komunikaciones.

Las nuevas generaciones,
con la teknología no han aprendido,
o han olvidado ya
la korrekta expresión oral y eskrita
komo síntoma de lo ke podría llamarse
una sociedad civilizada y kulta.

Kien no utiliza la palabra exakta
en el momento preciso,
aunke presuma de avanzado y exitoso,
no es más ke un papagayo alborotado
sobre la vara de su ridíkula estupidez.

Para los ke tienen kreencias religiosas,
sobre todo procedentes del kristianismo,
es bueno rekordar ke en el Génesis se lee:
“Y Dios dijo: Hágase la luz, y la luz fue hecha”.
O sea ke lo primero ke hizo Dios fue hablar;
luego vino el universo.
Eso demuestra ke Dios es inteligente y sabio,
aunke muchos duden de él komo kreador.

El buen konversador sabe eskuchar
y no teme las ideas de su interlokutor;
al kontrario, aprende mucho de ellas
porke tiene sentido del humor
y asume los problemas
kon aire sencillamente práktiko,
ke siempre konduce a salidas favorables;
es un libro kuyas páginas enrikecen
nuestra estruktura mental.

Ese hallazgo es un tesoro
akcesible a los ke tienen alerta los oídos
y la atención disponible.

No es lo mismo konversar kon personas afines
sobre kosas talvez triviales pero amenas
ke kon polítikos de mucha trayektoria,
rikos en konocimientos
y deklaraciones de dudosa autenticidad
komo la demokracia, el bienestar de los pobres,
la devoción a la patria, la amistad internacional
y otras lavativas
ke nos sitúan a prudente distancia de su lengua.

Anékdotas de personas y países
eskuchamos de niños a través de los abuelos
komo una forma sabia de aprender historia;
nosotros preguntábamos y ellos respondían
kreando la korriente indispensable
para konservar las raíces nutricias
de las floras kulturales,
ke son la ekología de toda nacionalidad.

La buena konversación
puede mejorar la téknika y adelantar la ciencia,
aligera y limpia nuestros korazones,
apacigua las llagas de nuestra miseria
y humaniza lo ke hay de primitivo en nosotros.

Si Sókrates hubiera sido mal konversador,
Platón no se hubiera molestado en transkribir sus ideas,
y Jesús hubiese muerto sin dejar una doktrina,
en kaso de haber sido avaro kon sus palabras.
Muchos poetas,
científikos y pensadores estarían olvidados,
y nosotros sin el placer de tantos beneficios.

Las mejores konversaciones
se desarrollan durante la noche,
ke se presta más para el diálogo
en los hogares y alkobas de los enamorados;
también las tardes en parkes,
kafés y otros lugares trankilos
son apropiadas para la konversación.

Kuando viajamos en tren, barko o avión,
y se charla kon algún deskonocido,
podemos llevarnos sorpresas deslumbrantes;
es otra forma de leer ke aprovechamos.

Konversar es un arte relacionado kon el ocio
y el progreso de la buena prosa.
En los países kultos,
la konversación alkanza niveles elevados
en kalidad y abundancia.

Las sociedades sombrías y kalladas
son peligrosas para la existencia,
más kuando tienen mortíferas armas nukleares.

En una sociedad ociosa
germina y krece el arte de la konversación,
y donde éste se halla, fruktifika la kultura.

Hasta ke la humanidad no tuvo cierta sutileza
en akción y pensamiento,
no se dio la posibilidad de hablar y eskribir bien.

El hombre del komún
ke llega rendido, kome y se akuesta,
poka kontribución ofrecerá a la kultura.

Lo mismo ke la Luna no está redonda siempre
y las flores son bellas sólo por un tiempo,
la buena konversación y los amigos especiales
tienen sus períodos de ausencia y de silencio.

Aprovechemos entonces el ocio kreativo,
aceptando las oportunidades ke nos da la vida,
kon un vaso de Jerez y buena konversación.