martes, 12 de agosto de 2014

Del libro "Trampantojos y otros versos"



FIDEL

Dictador para muchos,
testarudo en su grandeza,
mezcla democrática y demente,
soberano en su isla tropical
bloqueada por los amos del Norte.

Aferrado a su empeño solitario,
como solitaria es la estrella
de su emblema nacional.

Defendido y atacado
por turbas igualmente ciegas,
ancladas en el pasado del mundo,
que no avanzan como debiera ser
hacia el nuevo horizonte de la vida.

Combatiente invencible
en quien me asombran
sus grandes valores y carencias.
Luchador contra el tiempo,
que siempre termina vencedor.

Símbolo de autonomía
y contradictorio ejemplo
para las nuevas generaciones
en distintos lugares de la Tierra.
¡Leviatán indomable del Caribe!

Del libro "Trampantojos y otros versos"



MÁXIMO 48

Caballero de las Altas Torres y Pérez,
adelantado de las Provincias del Sur
y Comendador de los Creyentes
(pese a que siempre fue un ateo,
o al menos un sensible agnóstico).

Nació en una región insoportable
del departamento de Antioquia,
república de Colombia, Suramérica,
Planeta Tierra, Sistema Solar,
en los suburbios de la Vía Láctea,
galaxia esta del grupo local,
en el año 1938 de la Era Cristiana,
y muerto en el 2040, de manera natural.

Dicha precisión para mostrar que ustedes,
sin excepción alguna, son extraterrestres,
aunque similares en lo fundamental
al despistado poeta,
y a mí que soy su amanuense,
es decir que ustedes, el poeta y yo
formamos parte de la especie humana.

Del libro "Trampantojos y otros versos"



PEQUEÑA FÁBULA

Miró hacia atrás, hacia los lados
y confirmó que estaba sola.
Estiró el cuello, abrió el pico y bostezó.
Imaginó los peces del lago y bostezó de nuevo.
Cerró los ojos y pensó en el paraíso de las aves
más allá de los cerros y las nubes.

La soledad la penetró como una flecha;
quiso volar pero se arrepintió.
Aceitó sus plumas cariñosamente,
sacudió las alas, se sintió segura,
alzó una pata y se durmió.

El Sol brillaba sobre la llanura.

¡Oh inocencia de los seres puros!
Mientras plácidamente dormitaba,
un felino trepó hasta la cornisa
más cercana, de las viejas ruinas,
y dando un salto mayor de lo normal
cayó al vacío llevándose a la víctima,
que ya nunca de su sueño despertó.